E.S – 2.1 vol4
1010 Sang-woo abrió los ojos y se avergonzó por las extrañas escenas que ocurrieron hace algunas horas. El segundero de su reloj de acero inoxidable marcaba cada movimiento. Las ventanas estaban colgadas con persianas, no con cortinas; y los posters de un concierto de una banda de rock de cuatro miembros, estaban pegados en las paredes. Vio la laptop que él mismo había formateado, sobre un escritorio. Aparte de llaves, lociones para la piel, álbumes musicales y un encendedor Zippo. En una esquina de la habitación había un montículo de ropa y justo al lado, una patineta. No era necesario cuestionarse donde estaba. Tenía un dolor de cabeza terrible. La situación del día anterior se elevó en orden inverso en su mente. Mezclando lo que recordaba con lo que no, y justo en el momento que se percató que era miércoles, Sang-woo saltó de la cama. Las 11:23… Si el reloj no se equivocaba, el segundo período de clases ya había comenzado. ‘¡No!’ Necesitaba al menos tres minutos para lavarse los die…